David ha escarbado los rincones de la Ciudad Hermafrodita en la que reparte sus filias y sus fobias, sus sueños y sus pesadillas. Una ciudad donde escucha música unas veces y otras solo ruido, que le acoge amablemente o le destierra.
Ha intentado retratar los lugares y las gentes con la palabra y la imagen. Se trata de la relación de un hombre con su entorno, de un habitante con sus iguales, nada más y nada menos. David no aspira a trascender, a una placa en una esquina.
Esa ciudad hermafrodita, esos montones de escombros, esa poesía, esa música, ese video en vimeo, ese pequeño grande… Enhorabuena ! !
MIL GRACIAS DAVID, POR ESE BUEN ROLLO¡¡¡
UN ABRAZO.